Tocados de boda
Nos apasionan los tocados, es algo que no podemos evitar. Un buen tocado hace que un outfit sea perfecto o consigue darle un plus de elegancia y modernidad a una novia. Hemos hablado con María de MGM Accesorios para que nos enseñe sus últimos modelos, hacerles fotografías y una entrevista en la que cuenta cosas muy interesantes. No te la pierdas.
¿Cómo empezaste?
Empecé haciendo tocados de invitadas cuando se casó mi primera amiga. Después empecé a trabajar la porcelana para hacer tocados de novias.
¿Cómo encuentras la inspiración?
Sobretodo en redes sociales, sigo a muchísima gente que me inspira y veo muchísimas revistas.
¿Cómo ha cambiado el mundo de los tocados en los últimos años?
Quizás antes no se le daba tanta importancia al tocado y sin embargo ahora si ves como las chicas además de pedirlo se involucran en la creación, las formas, los colores, quieren hacerse incluso una prueba de la misma forma que ocurre con los vestidos de novia. No creo que predomine un estilo determinado, lo que si creo es que los tocados cada vez son más personales y dicen mucho más de quien los lleva.
¿Quién usa más el tocado?
Chicas entre 26 y 35 años son quienes más lo usan.
¿Vendes y alquilas?
En este momento solamente vendo. No alquilo porque al final el producto tiene un desgaste y además se crea de forma muy personal. Prefiero poner precios algo más económicos y que la clienta se pueda quedar con su tocado. Muchas veces lo que hago, sobretodo en las pamelas que es un producto muy caro, es no pegar, siempre coso. De esta forma puedes reutilizarla en varias ocasiones cambiando la decoración en función del evento que tengas pagando mucho menos que si volvieras a comprar una nueva.
También le doy a mis clientes una opción de 2 en 1. Empiezas la boda con una pamela y al quitártela te quedas con una diadema. Este sistema tiene muy buena acogida. Puedes utilizar el mismo día las dos opciones o en eventos diferentes.
Titular de la entrevistada
¿Con cuánto tiempo te suelen llamar las clientas?
Las novias llaman con más tiempo, son mucho más organizadas. Las invitadas a veces te llaman con dos semanas de antelación. Siempre intento dar respuesta y hacer el trabajo por lo que hay momentos de bastante estrés.
¿Vendes en cualquier lugar o solo a nivel local?
Vendo en cualquier lugar aunque obviamente trabajo más a nivel local porque es donde más me conocen. En cualquier caso, si me llama una novia de California y me pide un tocado se lo voy a hacer y se lo voy a enviar. Además no tienes por qué estar físicamente conmigo para hacerte un buen tocado. En el caso de las novias simplemente conociendo las medidas puedo hacer el trabajo. Gracias a Skype, Whatsapp o Facebook puedes tener un contacto muy directo con la otra persona esté donde esté en ese momento.
Si una persona viene con su idea de tocado ¿eres flexible?
Por supuesto, no me cierro a nada. Si tu vienes con la idea de tu tocado y no tiene nada que ver con lo que suelo hacer habitualmente, yo lo voy a intentar hacer, no soy cuadriculada para eso.
¿Disfrutas más haciendo tocados de invitada o de novia?
Sin duda tocados de novia porque es algo que creas de la nada. De una masa, consigues crear una flor, un pistilo y poco a poco va cogiendo forma. Esa sensación de crear algo de la nada es maravillosa.
¿Cómo organizas los plazos?
Siempre que viene una novia le pido que me diga cuándo le va a hacer la prueba de peinado el peluquero e intento tener el tocado más o menos hecho para que se lo pueda probar y terminar de ajustarlo. También nos ponemos de acuerdo con el peluquero con el tema del enganche. Muchas veces el tocado no lleva nada y le preguntamos al peluquero si es necesario para añadírselo.
¿Crees que esta moda de llevar tocado ha llegado para quedarse?
Ojalá que se quede, a mi me encanta. Creo que le da un toque de personalidad a las invitadas y las novias.
¿Qué es lo que más se lleva en Canarias?
No podría decir que un estilo predomine por encima del resto. Conviven varios estilos a la vez. Por una parte están las flores, también la porcelana y el metal que a mi me parece que tiene un punto muy cañero que le da a las novias un toque especial. Eso si, hay que saber trabajarlo bien. No todo el mundo puede hacerlo todo, cada uno debe hacer el estilo que mejor se le de. En mi caso, lo más que trabajo es la porcelana y ahora estoy desarollando una técnica que consigue darle un aspecto más antiguo a los tocados ¡y me encanta!.
